lunes, noviembre 12, 2007

Arazatí, arenera Arrospide y futuro previsible










Dos fotos de una misma chata arenera. La primera pasando frente al balneario Brisas del Plata –ubicado cerca de la margen derecha del Aº Cufré en el departamento de Colonia-, y en la segunda, un ratito más tarde, se puede observar a la misma embarcación pronta para entrar en la Arenera Arrospide. Se puede ver a la izquierda la escollera de Cufré, y al fondo y a la derecha del barco la zona de Arazatí

Los innumerables cursos de agua que llegan al Río de la Plata forman lo que desde antaño se conocen en la toponimia del lugar como rinconadas. El Rincón de la Angostura y el Rincón de Arazatí -los que describimos en anterior entrada-, y el Rincón de Cufré que se sitúa entre el Aº Pavón y el Aº Cufré.
Es en el Rincón de Cufré donde se encuentra la arenera de Arrospide, que luego de abandonar el Arazatí y realizar los daños ambientales que ya señalamos, se trasladó muy cerca, a mitad de camino entre los arroyos Pavón y Cufré.
Esta arenera, que obtuvo el permiso de la DINAMIGE sin ningún estudio de impacto ambiental en 1999, pero que venía extrayendo arena desde mitad del siglo pasado, ha causado un alarmante retroceso de la costa del Río de la Plata, producto del dragado que se realiza para permitir el ingreso de estas inmensas embarcaciones que se ven en las fotos.
Los habitantes y veraneantes de los balnearios Cufré y Brisas del Plata están acostumbrados a ver diariamente el tránsito de estas chatas areneras, y los que van a Cufré tienen como paseo el caminar hasta la “arenera”, y nadie de los que concurren al lugar ha dejado de observar los inmensos lagunones que se han formado arenal adentro, tanto producto de la extracción de arena, como de la erosión que produce el mismo Río de la Plata que con su oleaje continuo y sobre todo en los temporales y al no encontrar fondo llano donde aquietar sus bríos, golpea la costa con furia y se adentra con mucha fuerza por esa entrada de los barcos que vienen a buscar la arena para llevarla a Buenos Aires.
Es fácil imaginar la profundidad que necesitan esos barcos de gran calado para salir cargados de arena desde el interior del arenal
Aquí los controles brillan por su ausencia y mientras tanto la costa se degrada día a día, por lo menos hasta el año 2029 que es la fecha que termina el permiso para Arrospide…..
Estas mismas embarcaciones son las que, de otorgarse el permiso que se está tramitando en la DINAMIGE para una nueva arenera, van a recalar en Arazatí, que tiene costa llana y por tanto el dragado es inevitable, aunque no se introduzcan en tierra como en Arrospide.
Capítulo aparte merece el daño a la fauna ictícola, ya que la costa frente al Arazatí por su tranquilidad beneficia el apareamiento y desove de los peces que encuentran pocos lugares tan propicios como en esa zona, que sería afectada por el tránsito de barcos y la correspondiente contaminación producto de los desechos de los combustibles, alijes, etc.
El daño costero es inevitable, del daño interior al Arazatí ya hablamos anteriormente.

Seguiremos insistiendo.


Daniel Bentancor