miércoles, diciembre 26, 2007

TICs, Factor Solidaridad y Junta de Extremadura





Cuando salí de Mal Abrigo, pueblito aferrado a la falda de un "mar de piedra" llamado Sierra Mahoma en el noroeste del departamento de San José, acababa de tener una linda reunión con la Comisión de Vecinos que trabaja para ese caserío de apenas unas trescientas personas y de explicarles las oportunidades que brindan los Centros de Conocimiento, la Alfabetización Tecnológica y el uso de las TICs como herramienta para el desarrollo, y la ilusión y la esperanza de la gente me seguían acompañando en el regreso a San José.
Ilusión que también hemos visto en otros lugares de la amplia zona que rodea a ese pueblito rural y que se repite de igual forma en organizaciones, instituciones de fomento, etc., que el equipo de Factor Solidaridad ha visitado en pleno Montevideo, capital del país, lo que evidencia las similares necesidades y carencias de un amplio segmento de nuestra sociedad vivan donde vivan, y la avidez de descubrir ese "algo" del que han escuchado hablar, pero que no se les ha dado la oportunidad de acceder ni conocer.
Y la posibilidad es ahora concreta, ya que Factor Solidaridad ha celebrado un Acuerdo con la Junta de Extremadura - España- que nos permite implementar lo que hemos dado en llamar una "Red de Centros de Desarrollo Regional - Pirí Inchalá" ("Toldo Hermano" en lenguaje Charrúa): en Mal Abrigo y la amplia zona rural que lo rodea, incluyendo parte del departamento de Colonia, y en Montevideo: en los barrios Ciudad Vieja, Aguada y Barrio Sur.
Y en ese desafío trataremos de emular la exitosa experiencia extremeña, quien realiza la Alfabetización Tecnológica a través de los Nuevos Centros del Conocimiento -NCCs- utilizando además software libre: LINEX -sistema operativo desarrollado por Extremadura-, el que usaremos en nuestros respectivos Centros y difundiremos, además, a lo largo y ancho de nuestro país con el objetivo de que nuestros compatriotas puedan optar por la libertad y no sigan atados a intereses económicos que nada tiene que ver con ella.
Factor Solidaridad tiene una larga historia en la labor de promoción de los sectores socialmente marginados de nuestra sociedad, y en ese trajín han confluido y se han formado profesionales con un fuerte compromiso con el trabajo de inclusión ciudadana.
Y coherentes con esa orientación, se formó un equipo multidisciplinario que posee una riquísima experiencia y conocimientos en trabajo social, informática, y promoción del desarrollo, y que además se encuentran motivados y comprometidos con el proyecto que vamos a comenzar.
Por otro lado la relación con Extremadura no es nueva, se remonta varios años atrás, y tiene origen a partir del momento que la Junta Departamental de San José migrara todo su sistema operativo a software libre, donde integrantes de este proyecto tuvimos incidencia directa en tal decisión que marcó un hito importantísimo en Uruguay, pero que lamentablemente no fue seguida por ninguna otra institución gubernamental de nuestro país.
Desde entonces las instancias de cooperación, intercambio y conocimiento se han consolidado con el gobierno extremeño, donde la experiencia de los NCCs ha sido una idea que nos quedó siempre latente para implementar en Uruguay, sueño que hoy se nos hace realidad.
En forma muy sumaria podemos decir que los Centros de Desarrollo Regional -CDR- conformarán un espacio social y cultural donde las TICs serán una herramienta que usaremos para la promover el desarrollo de las comunidades más desfavorecidas, conectadas entre sí y con el mundo.
En ellos haremos hincapié en los aspectos de género, niñez y adolescencia, sin olvidarnos de los adultos y adultos mayores, brindaremos el espacio para el rescate de la cultura, historia y tradiciones regionales, se promoverá el cuidado y preservación del medio ambiente, e impulsaremos, en definitiva, el desarrollo local sustentable con el fin de mejorar la calidad de vida de todos los habitantes, y donde el factor humano tendrá preponderancia sobre el poder económico y podamos juntos recorrer el camino hacia la equidad.
Ciudad Vieja, Aguada y Barrio Sur nos verán "callejear" llevando nuestra propuesta que pretende ser la semilla que abonaremos entre todos en el espacio de los Centros, para que nazca y se ramifique hacia afuera de los mismos por los rincones más recónditos de los barrios montevideanos y se extienda más allá de toda frontera artificial.
En Mal Abrigo, Estación González y Cufré, pueblitos perdidos, dormidos por la quietud y el olvido que abruma, golpearemos las puertas para que se abran del largo letargo, y recorreremos los caminos polvorientos de la extensa campiña que los rodea para que los productores agropecuarios de toda esa comarca tengan las mismas posibilidades que los demás.
Es necesario involucrar en esta andadura a comisiones de fomento, agrupaciones locales, instituciones públicas y privadas, escuelas y demás centros de enseñanza, y a todos en general, con el objetivo que sientan como suyo el espacio de los Centros, que se empoderen de los mismos en forma participativa y abierta, y utilicen las TICs como una alternativa y una herramienta para mejorar la calidad de vida desde la realidad y entorno en que viven.
No existirán soluciones mágicas, sino que pondremos un medio a disposición de las comunidades con el fin de que les ayude al progreso tangible e intangible, para que sus propios actores los impulsen y rompan las fronteras y se sientan parte de una sociedad más grande de la que están acostumbrados a vivir.
A los tres días de aquella reunión nos llamaron de Mal Abrigo, y fuimos en una mañana de sol abrasador y calcinante a reunirnos nuevamente con los vecinos. Es que la primera vez les dijimos que teníamos un local al que teníamos que hacer algunas reparaciones, y bueno...al otro día de la primer reunión se encontraron espontáneamente y por si mismos y salieron a buscar otras alternativas donde podamos funcionar, y vaya si la encontraron ¡¡¡¡ Estaban orgullosos de mostrarnos una linda casita frente a la ruta que divide al pueblito por donde pasa la indiferencia a alta velocidad, y donde desde ahora en más se podrá ver que Mal Abrigo y toda su zona tiene su propia ruta hacia la Sociedad del Conocimiento.
La semilla está bien plantada.


Lic. en Ps. María del Carmen Gómez
Coordinadora General de Factor S

Proc. Daniel Bentancor
Director de la Red de Centros de Desarrollo Regional - "Pirí Inchalá"

email: ong.factors@gmail.com



lunes, noviembre 12, 2007

Arazatí, arenera Arrospide y futuro previsible










Dos fotos de una misma chata arenera. La primera pasando frente al balneario Brisas del Plata –ubicado cerca de la margen derecha del Aº Cufré en el departamento de Colonia-, y en la segunda, un ratito más tarde, se puede observar a la misma embarcación pronta para entrar en la Arenera Arrospide. Se puede ver a la izquierda la escollera de Cufré, y al fondo y a la derecha del barco la zona de Arazatí

Los innumerables cursos de agua que llegan al Río de la Plata forman lo que desde antaño se conocen en la toponimia del lugar como rinconadas. El Rincón de la Angostura y el Rincón de Arazatí -los que describimos en anterior entrada-, y el Rincón de Cufré que se sitúa entre el Aº Pavón y el Aº Cufré.
Es en el Rincón de Cufré donde se encuentra la arenera de Arrospide, que luego de abandonar el Arazatí y realizar los daños ambientales que ya señalamos, se trasladó muy cerca, a mitad de camino entre los arroyos Pavón y Cufré.
Esta arenera, que obtuvo el permiso de la DINAMIGE sin ningún estudio de impacto ambiental en 1999, pero que venía extrayendo arena desde mitad del siglo pasado, ha causado un alarmante retroceso de la costa del Río de la Plata, producto del dragado que se realiza para permitir el ingreso de estas inmensas embarcaciones que se ven en las fotos.
Los habitantes y veraneantes de los balnearios Cufré y Brisas del Plata están acostumbrados a ver diariamente el tránsito de estas chatas areneras, y los que van a Cufré tienen como paseo el caminar hasta la “arenera”, y nadie de los que concurren al lugar ha dejado de observar los inmensos lagunones que se han formado arenal adentro, tanto producto de la extracción de arena, como de la erosión que produce el mismo Río de la Plata que con su oleaje continuo y sobre todo en los temporales y al no encontrar fondo llano donde aquietar sus bríos, golpea la costa con furia y se adentra con mucha fuerza por esa entrada de los barcos que vienen a buscar la arena para llevarla a Buenos Aires.
Es fácil imaginar la profundidad que necesitan esos barcos de gran calado para salir cargados de arena desde el interior del arenal
Aquí los controles brillan por su ausencia y mientras tanto la costa se degrada día a día, por lo menos hasta el año 2029 que es la fecha que termina el permiso para Arrospide…..
Estas mismas embarcaciones son las que, de otorgarse el permiso que se está tramitando en la DINAMIGE para una nueva arenera, van a recalar en Arazatí, que tiene costa llana y por tanto el dragado es inevitable, aunque no se introduzcan en tierra como en Arrospide.
Capítulo aparte merece el daño a la fauna ictícola, ya que la costa frente al Arazatí por su tranquilidad beneficia el apareamiento y desove de los peces que encuentran pocos lugares tan propicios como en esa zona, que sería afectada por el tránsito de barcos y la correspondiente contaminación producto de los desechos de los combustibles, alijes, etc.
El daño costero es inevitable, del daño interior al Arazatí ya hablamos anteriormente.

Seguiremos insistiendo.


Daniel Bentancor


miércoles, noviembre 07, 2007

Arazatí, su ubicación





Mapa de ubicación de Arazatí. Estamos reclamando que la zona entre los arroyos Pavón y Pereira, llamada Rincón de Arazatí, sea declarada Área Natural Protegida...y seguiremos insistiendo.

Daniel Bentancor


martes, octubre 30, 2007

Arazatí: areneras, historia antigua y presente.











Muelle de la arenera que se instaló en Arazatí a principios del siglo XX.
Se introducía más de un kilómetro en el Río de la Plata, por donde era transportada la arena hasta los silos que servían de depósito. En la foto aérea se puede observar la pequeña locomotora con sus vagonetas llevando la arena rumbo a los silos. Allí los barcos la cargaban y la transportaban a Buenos Aires. Este muelle fue destruido por un temporal y solo quedaron los silos.
La naturaleza tiene su propia justicia, implacable e inapelable.



Compartimos estas fotos que rescatamos del pasado para mostrar parte de una explotación que destrozó Arazatí. Deseamos que la historia no vuelva a repetirse.
En tal sentido hemos presentado un petitorio para que se le niegue el permiso a esta nueva empresa que pretende extraer las arenas del Arazatí: ante el Director de la Dirección Nacional de Minería y Geología -DINAMIGE- que es quien tiene que decidir en definitiva, y ante el Intendente Municipal de San José, solicitándole a este último que manifieste su oposición a esta iniciativa e implemente a nivel local medidas tendientes para la conservación de la zona, amparado en la legislación vigente que le otorga potestades en tal sentido.
Aún no se nos otorgó una audiencia con la Directora Nacional de Medio Ambiente -DINAMA-, pero es bueno señalar que hemos tenido muy buena recepción por parte de integrantes de la división Áreas Protegidas de la propia DINAMA, quienes están contestes con nuestra propuesta de incluir a Arazatí como Área Protegida.
La lucha continúa.


Daniel Bentancor



martes, octubre 16, 2007

Arazatí, y sus bañados.





Vista aérea donde se puede ver el Arroyo de las Cañas, en pleno Arazatí -entre los arroyos Pereira y Pavón-, viboreando entre bañados y arenales, buscando la salida al Río de la Plata.
Permitir que se instale una arenera, como se proyecta en el lugar, sería acabar con un sitio de una riqueza ambiental espectacular en todo sentido.
El modelo de desarrollo sustentable que debemos seguir indica que Arazatí debe ser declarada Area Natural Protegida. No hay otra alternativa.

Daniel Bentancor



domingo, septiembre 23, 2007

Arazati...nuevamente amenazado




Desembocadura del Arroyo Sauce en el Río de la Plata, a la derecha se inicia el Arazatí.

El 21 de junio del corriente una Sociedad Anónima presentó en la Dirección Nacional de Minería y Geología -DINAMIGE- una solicitud de concesión para explotar las arenas en parte del padrón 3695 del departamento de San José, ubicado en lo que se conoce como Rincón de Arazatí, sobre el Río de la Plata. Cabe señalar que este tipo de emprendimientos requieren de la Autorización Ambiental Previa por parte de la Dirección Nacional de Medio Ambiente -DINAMA-, de acuerdo a lo que dispone el Decreto 349/005. Esta Dirección incluyó a la solicitud en la Categoría "B" , que establece el artículo 5 de dicho cuerpo normativo, debido a que consideró que la misma no producirá “impactos ambientales negativos significativos”, y no le exigió a la empresa el Estudio de Impacto Ambiental completo que dispone la Categoría “C”. Pero si la DINAMA conociera la zona en cuestión, tendría que haber rechazado de plano este emprendimiento y declarar su voluntad de incluir a Arazatí como Área Natural Protegida.
El área de Arazatí se enmarca entre el Arroyo Sauce, donde se encuentra el malogrado Puerto Arazatí, y el Arroyo Pavón, abarcando una zona costera sobre el Río de la Plata de unos 12 Km. de extensión, y tierra adentro de unos 6 Km., conformando lo que son: el Rincón de la Angostura (entre los Arroyos Sauce y Pereira) y el Rincón de Arazatí (entre los arroyos Pereira y Pavón).
El Rincón de la Angostura, previa canalización de los bañados, fue forestado casi en su totalidad, con pinos y eucaliptus, por una empresa que tiene su propio aserradero en las cercanías del Arroyo Sauce, lo mismo sucedió en la margen derecha del Pavón por otra empresa.
En lo que respecta el Rincón de Arazatí, se instaló a principios del siglo XX una arenera que exportaba a Buenos Aires el material extraído. De las canteras, situadas tierra adentro, se trasportaba la arena entre caminos abiertos entre el monte, bañados y arenales hasta un muelle de más de un kilómetro de largo que se adentraba en el Río de la Plata, por donde transitaba una pequeña locomotora con vagonetas que llevaba la arena hasta unos imponentes silos enclavados en el agua, donde era cargada por los barcos para llevarla a su destino.
Esta arenera funcionó hasta mediados del siglo pasado, y afortunadamente sólo quedan de ella, como tristes testigos de esa época desbastadora, los silos, inclinados y amenazando caerse a las aguas del bravío Río de la Plata, que arrasó con el muelle.
Después, el paso de los años y la ausencia de la mano del hombre permitieron que el lugar volviera a ser lo que antaño.
El monte nativo volvió a crecer entre los arenales y bañados, y la rica fauna regresó para quedarse
Las canteras se volvieron dos lagunas, que los lugareños llaman "de la Draga" y "del Guinche", pero la única que figura con nombre en los mapas es la primera: "Laguna del Sauce".
Los viejos pescadores artesanales dicen que en ellas se pescan los sábalos más grandes del Río de la Plata.
Entrar al Arazatí por la "Picada del Ciego" - puente al que solo le quedan viejas vigas- es introducirse en lo agreste, en lo exuberante de la rica flora, al que le sigue un camino invadido por la vegetación que termina, luego de pasar entre las dos lagunas, en el Río de la Plata.
Por la costa, al llegar al sinuoso y culebreante Pereira es cuando comienza la magia del paisaje, y otro tanto ocurre cuando se llega a la boca del Pavón desde Cufré, más caudaloso, pero los bañados y esteros que lo rodean impiden la marcha del visitante ocasional, solo accesibles para los “vaqueanos”.
Entre estos dos arroyos está la espesura del Arazatí.
Su rica flora y fauna hicieron del lugar morada de nuestros indígenas, pero la riqueza arqueológica del lugar sigue escondida, a pesar de los estudios que se han hecho. Por citar algunos ejemplos, cabe mencionar a Carlos Maeso, que en 1911 exploró el Pavón y en su relato nos habla que se encontró con un "espectáculo conmovedor de la naturaleza". Más tarde llegó Penino al Pereira, y también el Centro de Estudios Arqueológicos -CEA-, más tarde, quienes nos dejaron fieles testimonios de la presencia indígena en la zona. Hoy el lugar es parte del "Proyecto de investigación arqueológica en la cuenca inferior del Río Santa Lucía y costa del Departamento de San José" por un Convenio de Cooperación entre el Ministerio de Educación y Cultura y la Intendencia de San José.
En cuanto a las aves, solo basta mencionar el censo que Francisco Rilla publicara en "Uruguay.Informe Anual 2004", que nos dice:
"Algunas áreas presentan un alto grado de perturbación con especies leñosas exóticas invasoras.
Al parecer los humedales que presentan un mayor grado de perturbación están sujetos a la extracción de arena (lo que acarrea la tala del bosque nativo y la plantación de otras especies con fines ornamentales) y son influenciados por la actividad antrópica posterior debido a la consiguiente apertura y mantenimiento de rutas
Los bañados de Arazatí actúan como un sitio de paso alternativo para la migración de primavera y otoño de aves acuáticas neotropicales migratorias (familias Charadriidae y Scolopacidae). En el área se han identificado 150 especies de aves, que representan el 30% de la avifauna del Uruguay. Entre ellas se incluyen especies residentes, residentes estivales, visitantes estivales, visitantes invernales, aves de paso y errantes.
La zona se caracteriza por la diversidad de aves acuáticas y costeras del estuario platense. En el área se registran grupos de Cuervillo cara afeitada (Phimosus infuscatus) y gaviotas capucho café (Larus maculipennis). También frecuentan la zona la Garza blanca chica (Egretta thula), Garza blanca grande (Casmerodius albus) y Espátula rosada (Ajaia ajaja). En los humedales interiores se pueden observar varias especies de Anseriformes.
Algunas de ellas, como el Cisne cuello negro (Cygnus melanocorypha), el Pato cara blanca (Dendrocygna viduata), el Pato silbón (Dendrocygna bicolor) y el Pato picazo (Netta peposaca), llegan a concentrarse en grandes bandadas preferentemente en los meses de invierno y primavera. En Arazatí confluyen especies migratorias que llegan desde el Hemisferio Norte y de diversas regiones del Hemisferio Sur. Algunas, como el Chorlo pampa (Pluvialis dominica) se reproducen en el Hemisferio Norte y llegan a la región, preferentemente a la zona de la desembocadura del Arroyo Pereyra y la costa del Río de la Plata en los meses de primavera y verano"
El Profesor Jorge Chebataroff nos dice que la explotación de las arenas en forma intensiva y mal regulada en los departamentos de San José y Colonia, han hecho desaparecer parcial o totalmente el cordón arenoso, o las barras protectoras, y la correspondiente vegetación fijadora de la costa.
Y si alguien piensa que estos emprendimientos benefician al progreso de nuestro país y generan empleo, seguro se equivoca, y aunque la modalidad de extracción de la arena en Arazatí que se propone sea diferente, inevitablemente se va a modificar notoriamente el lugar.
Quien explotara las arenas de Arazatí, luego se trasladó a lo que hoy se conoce como la "Arenera Arrospide", situada entre el Arroyo Pavón y el balneario Boca del Cufré, también en el departamento de San José, obteniendo la concesión para la explotación de las arenas del lugar en el año 1999 sin ningún estudio ambiental previo. En este lugar, donde se dragó el Río de la Plata para permitir el ingreso de inmensas embarcaciones, llamadas "chatas areneras", que transportan diariamente, rumbo a Buenos Aires, su carga de arenas libres de cualquier control, la costa ha retrocedido en los últimos 30 años más de doscientos metros.
Si comparamos este retroceso de la costa producto de la actividad extractiva de arena, con lo que nos dice un informe de 1998 de la Comisión Nacional Sobre el Cambio Climático, llamado "Estudio País sobre el cambio climático", que estima una tasa de erosión de hasta veinte metros en 25 años para las barrancas de la costa del departamento de San José, salta a la vista el daño que estas areneras producen en la costa del Río de la Plata.
El mismo informe señala que "la protección de áreas naturales se considera una acción prioritaria en un plan de desarrollo costero".
El Ministerio de Ganadería Agricultura y Pesca en la "Carta de Suelos y Aptitud General de Uso", que acompaña a los "Resultados e Interpretaciones de la Cartografía de Suelos", basados en trabajos de campo en el sur del departamento de San José, nos dice que la mayoría de los suelos de Arazatí son tierras no cultivables y de "Reserva Natural de la Flora y Fauna".

El departamento de San José tiene escasas áreas naturales costeras, una es la playa Penino, designada "Playa Ecológica" por el Gobierno Departamental de San José, y la otra es Arazatí.
Playa Penino por ser pequeña y estar dentro de una zona muy poblada no podrá ser sostenible como todos deseamos, en cambio Arazatí, como hemos señalado, tiene hoy menos impacto humano, es mucho mayor en extensión, es difícil su acceso, y posee más diversidad en la fauna y en la flora, lo que la hace indicada para que sea declarada Área Natural Protegida, o por lo menos se impida que la mano del hombre la dañe nuevamente, aplicando otras alternativas que la normativa legal dispone. Hay que señalar, además, que las intendencias municipales tiene ingerencia y competencia en materia de Medio Ambiente, por lo que la Intendencia de San José puede intervenir adoptanto posición en defensa de lo que es el patrimonio ambiental departamental y nacional, como esperamos que así suceda antes de que sea tarde, y no espere a la DINAMA que solo ha exigido un tímido estudio ambiental.
Y en esta apretada síntesis, nada mejor que terminar con las palabras del Prof. Jorge Chebataroff, quien conoció y estudió nuestra geografía con más profundidad que ninguno, cuando en un artículo del Suplemento Dominical de "El Día" del año 1953, titulado "En el Arazatí Boscoso y Anegadizo", nos decía:
"La impresión que lleva el visitante de esta zona, donde los montes indígenas y las formaciones arbustivas de candela o chirca de monte (Dodonea viscosa) que incluyen arazá, marcela, el senecio llamado vulgarmente margarita de los arenales, y muchas otras plantas, destacándose entre los árboles el sauce criollo, el ceibo, el tarumán espinoso, el coronilla, el molle, el tala, el espinillo, el quebradillo, el mataojo, etc., formaban antiguamente espesuras casi intransitables, que rodeaban bañados de suelo movedizo, poblados de Scirpus gigantous (espadaña), totora, juncos, duraznillo blanco y sarandíes, y donde los ceibos aparecían cubiertos de una tuna larga y fina (Rhipsalis humbricoides), claveles del aire y otras epífitas; donde se refugiaban otrora muchos matreros protegidos por la exuberancia y densidad de la vegetación, y donde las vueltas y divisiones en brazos, de los arroyos Pavón y Pereira, complican hasta un grado inconcebible la geografía de la región, es que por lo menos pasó Atila por esa zona, pues de las famosas espesuras que antiguamente pocos osaban penetrar por temor a extraviarse o por los peligros representados por la yarará o los maleantes, quedan solamente grupos de árboles que todavía se aferran al suelo húmedo, y de arbustos que han entrado en competencia con la multitud de plantas invasoras.
De las obras de las empresas areneras quedan hoy sólo los restos, viviendas semiderruidas, depósitos, los elevadores de arena, algunos árboles cultivados por los antiguos pobladores.
Huellas de un fracaso humano se ven por doquier; parecería que la naturaleza hubiera deseado vengarse del hombre, obligándolo a abandonar el lugar.
...los vecinos del lugar parecen persuadidos de la necesidad de defender lo restos de los montes indígenas, de proteger las aves acuáticas (garzas, chajá, espátula, etc.) que pululaban antiguamente en los bañados y que hoy son mucho más escasas.
El viejo Arazatí cuyo nombre era pronunciado con cierta emoción en otras épocas, ya no es aquel bosque cerrado e intransitable, verdadero paraíso y refugio de la fauna, particularmente de las aves acuáticas; los árboles han sigo castigados por doquier, los médanos removidos, la vegetación herbácea ahogada por las plantas invasoras; muchas aves han sido aniquiladas; otras asustadas por los disparos de las armas de fuego han emigrado a otros lugares más seguros; el chajá se levanta para lanzar hoy un verdadero grito de desesperación, ante tanta depredación.
Todavía quedan junto al litoral bosques de ceibos, donde los árboles han sido arrancados de raíz por el oleaje; por doquier se ven huellas de los grandes temporales; pero es mucho mayor el desastre causado por la acción humana, que los nuevos habitantes, patriotas de verdad, tratan de corregir."
Afortunadamente y luego de más de cincuenta años de la reseña de Chebataroff, Arazatí volvió a ser casi el mismo de antes, no le demos otro golpe mortal.


Proc. Daniel Bentancor





lunes, agosto 20, 2007

Un cielo como techo... baldosas como colchón...



..."Tener un techo, es tener un lugar acogedor donde uno siente que pertenece, que le es propio, es el hogar, cálido como aquel primer lugar que nos cobijó que fue el seno materno y al cual siempre queremos volver..."
Por eso para quienes integramos el Equipo de Trabajo en Calle de Factor S nos significó un continúo desafío desde lo humano, desde lo técnico, tomar contacto con quienes pernoctan en las calles de nuestro Montevideo.
Hace casi dos años atrás surgió esta propuesta de trabajo, recuerdo hoy las nochecitas compartidas con los compañeros de la Organización, horas de sueños y ganas... horas de aprender de los saberes que fuimos cosechando a lo largo de nuestro trabajo en los planes invierno y caramba! si que aprendimos, en lo personal, cursé materias que nunca en facultad había cursado... las de las emociones que se ponen en juego cuando se trabaja con quienes son los mas desprotegidos de nuestra sociedad, y como se puede (o no) conjugarlas con el bagaje teórico, con los años de trabajo en lo social... y debo decir que tuve un maestro, una guía, un compañero y amigo por sobre todas las cosas, Alberto Hein, quien fuera la persona que mas me enseñó... porque aprendí de él que la lucha en favor de un mundo alternativo debe comenzar dentro de nosotros mismos... porque aprendí de él que se pueden empañar los ojos de tristeza sin abandonar la esperanza...
Hoy seguimos caminando...
Les voy a contar sobre el Equipo de Trabajo en Calle de Factor S.
Comenzamos en el invierno del año 2005, en convenio con el MIDES, el que apostó a propuestas de abordaje diferentes...
No olvido las primeras noches de caminatas... las primeras derivaciones al Refugio Andares, la risa en los rostros ya conocidos que nos preguntaban si podían llevar su mascota... y sí... Andares se inauguró con quienes sufrieron las expulsiones de todos los planes invierno... los que ya llevan demasiados años con el suelo como colchón y el cielo como techo... y también se inauguró con dos perros... fieles compañeros de sus dueños... depositarios de miedos, alegrías y secretos....
La Brigada, como nosotros la llamamos, está integrada por Eduardo (Lic. en Trabajo Social, que bueno es contar con su calma y saber), Paola (Lic. en Ps., que buena es la dulzura que atraviesa todo su quehacer ), Mane (Ed. Social, que buena su fuerza y sus ganas siempre presentes), Walter (Arquitecto, si, como leen, un compa arquitecto que es master en planificación social y que bueno! porque nos hace aterrizar para poder volar mejor), Majo (operadora de calle, una compañera que ha vivido la situación de calle y que bueno, porque desde ese lugar, aporta la mirada que ninguno de nosotros tiene) y quien les escribe, Carmen (la flaca) coordinadora de la Brigada.
Estuvieron mas compañeros en este Equipo, el negro Marcelo (conocedor como pocos de la calle), Claudia (nuestra compañera está estrenando su maternidad!), Daniel (aún hoy seguimos aprendiendo de él y seguro que siempre) y Guillermina, quien en forma voluntaria nos acompañó con una sonrisa siempre presente.
Trabajamos con las Brigadas de voluntarios que en las noches de invierno están presentes en un Montevideo frío y silencioso... Taller de Nazareth, Semilla, Caldo, manos solidarias que se tienden para entibiar "cuerpos y emociones"...
A fines de noviembre del año 2006, cerramos este ciclo... fueron muchas las experiencias compartidas, muchos los desafíos, y por sobre todo el sentimiento de que fue posible, de que es posible.
Basamos nuestra propuesta en generar un espacio que permitiera la creación de vínculos personalizados entre el Equipo y las personas en situación de calle, como punto de partida.
Fuimos aprendiendo en la marcha, fuimos capaces de replantearnos objetivos, estrategias... porque cuando comenzamos a recibir los primeros " NO quiero un refugio", nos preguntamos como era que esa persona optaba por el frío, por un cartón debajo del cuerpo, o la indefensión de estar en la calle, a una ducha caliente, una cama, un plato de comida a diario... Aprendimos que muchos de esos hombres o esas mujeres no tenían demandas y que tal vez hacia ya mucho tiempo habían dejado de demandar el "techo" que nosotros le ofrecíamos.
Comenzamos entonces a escuchar desde otro lugar, a quien teníamos delante, para lograr llegar al punto de la vida de esa persona en donde se produjo el quiebre. "Porque por sobre la pérdida de vivienda o de trabajo están las pérdidas de lazos afectivos, reforzados en la mayoría por la pérdida de lazos solidarios de una sociedad que "no los quiere ver" y comprendimos que mas que un "techo" para descansar por las noches, lo necesario es un "techo social", de proyectos de vida... de pertenencia."
La tarea en calle, principalmente para quienes somos profesionales, conforma un modelo absolutamente diferente de intervención, de ahí lo de un desafío constante... noche a noche, porque la población que pernocta a la intemperie es muy diversa, con historias diferentes, infinitos recorridos... por ello, entonces, fue fundamental en cada contacto realizado, el lograr crear un espacio que no irrumpiera la realidad de la persona violentándola, sino como espacio promovedor de posibilidades hoy truncadas. Nuestras mejores herramientas para ello, fueron la empatía, la mirada, la escucha y la voz.
Hicimos por primera vez en nuestro país, jornadas de recreación para y con quienes duermen en la calle... vimos películas, compartimos juegos... canciones, risas y anécdotas.... sabiendo que no era fácil verlos marchar de regreso a sus rincones en la ciudad... pero convencidos de que en este poquito a poco a muchos la risa les volvió a surgir desde el alma...
Logramos en suma, respetar sus derechos ante nuestra intervención y es así entonces, que comenzaron a surgir las posibilidades de cambio.
Como cierre, sólo quiero decir, que es posible, seguro que es posible.

Ma. Del Carmen Gómez